Así, nuestro Gran Mariano, emulando al humorista José Mota, nos ha venido a decir a todos los españoles que los impuestos seguirán subiendo, matizando, eso sí, respecto del momento de la subida que "Hoy no, mañana".
Causa desasosiego saber que, pese a que se trata de la "previsión" de un político, la misma tiene pretensión de cumplirse.
Nos encontramos, pues, ante una “advertencia”, ante un nada "sutil" aviso a navegantes: Después de manifestar su creencia (que ya no es convicción, pues no estamos en campaña electoral) de que no habrá que seguir subiendo los impuestos de forma inmediata, D. Mariano advierte que, sin embargo, "nada es para siempre". O lo que es lo mismo: que los impuestos (la subida de los mismos a los ciudadanos) es una herramienta útil y rápida para obedecer a las Agencias de Calificación y, si éstas "señalan la necesidad...", pues, eso, que "...habrá que hacerlo".
Porque ya sabemos, «nosotros, en realidad, antes de llegar a ser elegidos, y pese a nuestra campaña electoral y nuestras responsabilidades de Gobiernos autonómicos,, lo ignorábamos todo, todo, todo...», lo que incluye a la desviación del déficit, la situación del IPC, el estado de las cuentas de las autonomías (incluso de las que llevamos gobernando desde hace más de una década), etc., etc., etc...
Y claro, ante tanto "loignorito" no queda más que el recurso al "sablazo" al contribuyente, que ése solo puede “presionar” (o “hacer sugerencias”) cada cuatro años y, en todo caso, no lo hace, porque "¿para qué?"
(Miguel Angel Prado)
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