29 de octubre de 2012

Cáritas y Amancio Ortega

Faustino Villalibre

Periodista Digital 

La caridad no crea riqueza, solo pone parches a la pobreza
El Evangelio de San Marcos dice: Estando Jesús sentado enfrente del cepillo del templo, observaba a la gente que iba echando dinero: muchos ricos echaban en cantidad; se acercó una viuda pobre y echó dos reales. Llamando a sus discípulos les dijo: "Os aseguro que esa pobre viuda ha echado en el cepillo más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero ésta, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir".
En España tenemos ya unos cuantos millones de personas que viven rozando el umbral de la pobreza, y otros muchos ya son pobres de verdad, aunque aquí el nivel de la pobreza no se mide como en el Tercer Mundo. Si aquí se considera pobre al que vive con menos de 14 € al día, en el Tercer Mundo aun tenemos más de 1000 millones de personas que viven con menos de 1 € al día, y otros 700 millones con menos de 2 € diarios.
En nuestro país la pobreza está aumentado a pasos agigantados y, aunque nos digan lo contrario, aún no hemos tocado fondo, pues los parados siguen en aumento, las subsidios de paro agotándose para muchos, los desahucios crecen de día en día y más de 200 españoles intentan suicidarse a diario, desesperados por la crisis. Hay muchas familias y personas sufriendo lo indecible.
Dicho esto tenemos que decir algo de ese donativo de Amancio Ortega precisamente para Cáritas. En diferentes carteles de Caritas se lee: "trabajamos por la justicia", y Caritas habla y escribe reiteradamente de la "denuncia profética de la injusticia".
Precisamente la gran mayoría de los empobrecidos que tenemos en este país, está causada por las injusticias tremendas de los de arriba hacia los de abajo, por los gobiernos y parlamentarios que propusieron y aprobaron las leyes injustas que ahora caen sobre los más impotentes e indefensos, por la aprobación y consentimiento de paraísos fiscales, por las facilidades dadas a los ricos para sacar cantidades enormes de dinero del país (desde junio de 2010 a junio del 2011 más de 300.000 millones de €), por una legislación fiscal por la que pagas a Hacienda proporcionalmente tanto menos cuanto más tienes, por el manifiesto secuestro del poder político por el económico, etc. etc.
Ante la tormenta tan grande que está cayendo sobre millones de españoles que cada día tienen el paraguas más roto, o ya se quedaron solo con las varillas o ya se lo llevó todo el huracán de la crisis, comprendemos que Caritas sienta tentación, y haya caído en ella, de aceptar esos 20 millones € que Amancio Ortega le entrega, pero ese no es el camino, como tampoco es admisible que la Conferencia Espiscopal no solicite al gobierno que recorte las millones que le entrega en la misma proporción con que lo hizo con las demás partidas del presupuesto para 2013, pues la partida a la Iglesia vía Conferencia Eìscopal quedó intacta, sin recorte alguno.
El verdadero camino está en la lucha por la justicia y la denuncia de los injustos para que haya menos pobres, y no en socorrer a los empobrecidos causados por la injusticia de los injustos, aquí o donde quiera que sea.
El señor Amancio Ortega (quinto más rico del mundo, según la lista Forbes) será personalmente una excelente persona, pero su Fundación, de donde proceden esos fondos ¿también lo es? De dónde salieron esos 20 millones de € y los 11.400 millones que ganó en el ejercicio pasado?
Según se está publicando estos días reiteradamente, hay muchas dudas sobre la honestidad y limpieza en el proceso de obtención de la enorme fortuna del señor Amancio, y por consiguiente de los fondos de su Fundación.
A parte de la desgravación a Hacienda, aprobada en las leyes, que suponen esos donativos, es eticamente lícito que una persona tan rica sustraiga una sustanciosa cantidad al erario público, mediante esa desgravación?
¿Son ciertas estas noticias que ponemos a continuación, relacionadas con Inditex o Zara? En ellas figuran las fuentes de su información. Copiamos y pegamos:
"Brasil: Detectan otros 30 talleres de “esclavos” vinculados a empresa textil Zara
No se trata de un caso aislado. Según el Gobierno brasileño, los dos talleres de Sao Paulo en los que inmigrantes ilegales fabricaban ropa para la conocida empresa textil española, Zara, en condiciones que rozaban la esclavitud son sólo la punta del iceberg.
El Ministerio de Trabajo del gigante suramericano asegura que al menos en otros 33 talleres subcontratados por la firma gallega se habrían detectado las mismas irregularidades: hacinamiento, condiciones insalubres de trabajo y salarios de miseria. Pero la multinacional Inditex, propietaria de Zara, insiste en que se trata de una “situación excepcional”, según señaló ayer a El Confidencial un portavoz oficial del grupo textil fundado por Amancio Ortega.
Según reveló ayer la auditora fiscal del Ministerio de Trabajo Juliana Cassiano al diario O Globo, el de mayor tirada del país, la mayoría de los 15 inmigrantes bolivianos y peruanos liberados en los dos talleres de Sao Paulo no tenían documentos, habían sido introducidos clandestinamente en Brasil por redes de tráfico de seres humanos y trabajaban en unas condiciones “terribles”.
Su jornada laboral era de hasta 16 horas diarias, hacinados con cinco menores de edad en un espacio minúsculo que servía a la vez de taller y vivienda, con un solo cuarto de baño sucio y sin agua caliente, “y todo para ganar 200 o 300 reales [entre 90 y 130 euros] y estar endeudados con las mafias. La situación era muy, muy grave”.
Inditex volvió ayer a responsabilizar a la firma AHA, uno de sus más de 50 proveedores en Brasil, de haber subcontratado de forma “no autorizada” la fabricación de prendas de Zara en los dos talleres textiles clandestinos descubiertos por las autoridades de aquel país. Pero los inspectores del Ministerio de Trabajo rechazan los argumentos de la multinacional de Arteixo (A Coruña). “Si nosotros podemos rastrear la cadena de producción, Inditex también puede hacerlo”, sostiene Cassiano. “Y si Inditex es capaz de controlar la calidad de sus productos durante todo el proceso de producción, ¿por qué no hace lo mismo con la mano de obra que emplea?”.
Segunda operación desde mayo
El pasado mes de mayo, una operación similar a la desplegada en Sao Paulo permitió a la Superintendencia Regional de Trabajo y Empleo desmantelar varios talleres clandestinos en la ciudad de Americana, en el interior de la región paulista. En aquella ocasión fueron liberados 52 trabajadores, casi todos de nacionalidad boliviana, que estaban siendo explotados y sometidos a unas condiciones laborales degradantes.
Según fuentes de la cadena de televisión Band -la segunda de Brasil, cuyos reporteros destaparon las presuntas irregularidades cometidas por Zara en Sao Paulo-, la mayoría de los 52 trabajadores esclavos liberados también elaboraba prendas de ropa para la firma de moda española.
El portavoz de Inditex consultado por El Confidencial aseguró que “la seriedad de esta compañía es modélica”, y señaló que el grupo textil realiza anualmente más de un millar de auditorías a proveedores de sus marcas en todo el mundo para asegurarse de que cumplen su código de conducta.
“Estamos colaborando con las autoridades brasileñas para revisar los sistemas de producción de nuestros proveedores y evitar que casos como el de Sao Paulo vuelvan a producirse”. El representante de la multinacional gallega eludió comentar, sin embargo, la denuncia del Ministerio de Trabajo sobre la existencia de al menos otros 30 talleres clandestinos ligados a Zara".
"Adquirir una prenda de ropa de las marcas del grupo Inditex que se haya confeccionado en Marruecos supone refrendar un sistema de producción en el que las trabajadoras acumulan hasta 65 horas a la semana detrás de una máquina para cobrar un salario de 178,72 euros mensuales.
Estas condiciones laborales las mantienen “viviendo en situación de pobreza” mientras el fundador del imperio textil, Amancio Ortega, se consolida como la mayor fortuna de España y la tercera en el mundo.
La situación se atestigua en la investigación ‘La moda española en Tánger: trabajo y superviviencia de las obreras de la confección’, elaborada para la ‘Campaña Ropa Limpia’ de las ONG española Setem y gallega Amarante Setem y que analiza las condiciones de vida y trabajo precarias que sufren las trabajadoras en talleres textiles de la ciudad de Tánger.
Inditex no es la única que se beneficia de esta situación. Las empresas españolas de moda más importantes tienen factorías propias o proveedores en Marruecos. El Corte Inglés e Induyco, Cortefiel, Mango y muchas otras firmas europeas “operan en el mercado marroquí aprovechando unos costes de producción claramente inferiores a los de la Unión Europea y la cercanía geográfica”.
"El País, 20 de diciembre de 2011: Zara llega a un acuerdo con el Gobierno de Brasil por una acusación de practicar trabajo esclavo.
La disputa comenzó en agosto cuando el Ministerio Público de Trabajo abrió 52 procesos de infracción a Zara al haber hallado evidencias de que la firma AHA, uno de los proveedores de la española en Brasil, compraba ropa elaborada en dos talleres donde los trabajadores, procedentes sobre todo de Bolivia y Perú, eran sometidos a condiciones equivalentes a la esclavitud. Entre ellas, el trabajar en lugares totalmente insalubres, con horarios excesivos, mal remunerados y sin respeto a los derechos más elementales del trabajador.
El director global de Asuntos Corporativos de Inditex, Jesús Echevarría compareció en septiembre en audiencia pública en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados de Brasil. Allí manifestó la intención de la empresa de colaborar con las investigaciones y resolver la situación".
"Zara solo factura en España las ventas 'online' nacionales
www.elpais.com/articulo/economia/Zara/solo/factura/Espana...
por colomer el 07-01-2012 08:33 UTC publicado el 07-01-2012 12:45 UTC
Inditex cumple lo prometido... a medias. Tras la polémica suscitada al conocer que la empresa propietaria de Zara facturaba todas sus ventas por Internet a través de una empresa con sede en Irlanda, la compañía que preside Pablo Isla anunció que a partir de 2012 canalizaría sus ventas electrónicas desde España".
Hasta aquí las citas textuales.
Pensamos que aceptar donaciones por parte de Caritas, sin tener meridiana claridad sobre la procedencia de las mismas, no es procedente ni ético en quien debe ser modelo acabado de trasparencia y honestidad en coherencia con el Evangelio.
Conste que soy voluntario de Caritas precisamente porque valoro la importancia de su trabajo, y más en la actual coyuntura, aunque creo que debería poner mucho más el acento en la colaboración con el Tercer Mundo, no solo Caritas sino todas las organizaciones sociales, porque allí la situación (y lo sé por experiencia personal) es infinitamente más grave que aquí.
Para terminar solo dos reflexiones bien sencillas:
-La caridad no crea riqueza, solo pone parches a la pobreza. Poner parches a la pobreza con dinero de quienes la causan es totalmente inadmisible.
-Donde hay justicia, no hace falta caridad. Hoy hay de sobre para todos, pero falta justicia.
Un cordial saludo.-Faustino

No hay comentarios:

Rebelion

Web Analytics