16 de febrero de 2007

Novartis

Novartis ha llevado al gobierno Indio a los tribunales después de que le hayan denegado la solicitud de patente para un medicamento contra el cáncer, Glivec.

El gobierno Indio se ha limitado a aplicar su ley, redactada según la Declaración de Doha, firmada en 2001 en el marco de la OMC, que antepone la vida de las personas a los beneficios económicos.

La empresa farmaceútica suiza ha presentado una demanda contra esa ley. Lo curioso es que no lo ha hecho en la OMC, sino directamente en los tribunales de la India, no tampoco por uno de sus medicamentos más importantes. Dando la sensación de que pretende acosar al gobierno de la India, principal proveedor de genéricos de alta calidad a bajo coste. De esta manera, si ganan un juicio que en principio podría parecer menor, darán un duro golpe a la salud de millones de personas en los países empobrecidos.

La multinacional, sabedora de cómo afecta esto a la conciencia cívica europea, ataca nuestras conciencias explicando que, si queremos medicamentos nuevos y eficaces contra graves enfermedades, si queremos que se siga investigando, las patentes han de existir y han de ser caras.

Así que a ver qué puede más en el ciudadano europeo, ¿su concienca solidaria o su egoismo?

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