9 de diciembre de 2010

Carta de un controlador aéreo

- El ultimo decreto, de los cuatro que han impuesto este año, fijaba
la jornada en 1670h anuales por controlador, a turnos de mañana, tarde
y noche, la implantación del servicio forzoso, es decir, te programan
turnos en tiempo real sin garantizar descansos semanales ni planificar
un mínimo de vida personal, se cancelan vacaciones, se deniegan
permisos, guardas legales por cuidado de niños ...etc

-Se aviso hace meses por parte del colectivo de que, a pesar de todo,
no llegábamos a diciembre con esas condiciones, es decir, la gente
habría cumplido las 1670h en noviembre o como mucho a primeros de
diciembre. Añadir que hay casi 100 controladores formados en SENASA a
los que AENA no ofrece contrato de trabajo.

- La AESA (agencia estatal de seguridad aerea) tipifica como falta muy
grave exceder de esas horas, siendo responsable el propio controlador.
Supone sanción económica y carcel en el peor de los casos. Por otro
lado, AENA (aeropuertos españoles y navegación aérea) obliga a los
controladores a ocupar sus puestos a pesar de pasarse de horas,
haciendo una interpretación personal de la norma. Ambas, AENA Y AESA
dependen del Ministerio de Fomento.

- Modificación por cuarta vez de las condiciones de trabajo del
colectivo vía decreto-ley. No se respeta las condiciones mínimas del
Estatuto de los Trabajadores, valga como ejemplo la legalización de
que nuestra disponibilidad es de 24h los 365 días del año, a
discreción de nuestro gobierno; las bajas laborales hay que
devolverlas a la empresa, lo que significa que las horas programadas
durante ese periodo te las pueden recolocar durante el año; las
reducciones de jornada por guarda legal las compensan, en caso de que
te las concedan, programándote más horas, es decir, si mi jornada
mensual es de 120 horas y pido una reducción del 50% pues me programan
240h y asunto arreglado ...etc

- Independientemente de las condiciones de trabajo del colectivo, se
implantan durante el año una serie de prácticas en la gestión de la
navegación aérea como la supresión de la formación continua de los
trabajadores, modificación de procedimientos e incremento de las
capacidades de los sectores de control, todo esto unilateralmente y
sin previsión ni simulación del impacto que pudiera tener en la
operativa diaria. Esto supone una implementación con tráfico real, es
decir, una barbaridad.

- Ante este escenario se produce un efecto dominó dentro del colectivo
de rabia y frustración y paulatinamente se abandonan las posiciones de
trabajo. Unos por compañeros que pasados de horas deciden no saltarse
la ley y se les abre expediente disciplinario grave, otros por esta
reacción de la empresa y por la aprobación dictatorial del decreto.
Reseñar que no hay menoscabo de la seguridad, dado que los tráficos
que en ese momento están volando se les da el servicio pertinente y se
mantiene un retén ante la posibilidad de que hubiese circunstancias
especiales como por ejemplo tráficos de transplante de órganos.

- El Estado amenaza con la apertura masiva de expedientes
disciplinarios, despidos y sanciones económicas. El colectivo se reúne
por dependencias en hoteles o locales habilitados para coordinar sobre
todo el flujo e intercambio de información contradictoria que los
medios ofrecen.

- No pueden ser imputados delitos ya que no están tipificados, por
tanto se necesita militarizar el Estado. Al declarar el estado de
alarma el colectivo queda sometido a disciplina militar y se le
"ordena" reanudar la prestación del servicio. El incumplimiento de la
orden supone un delito de desobediencia. En los centros de trabajo,
bajo disciplina militar se preparan para esposar y detener a todo
aquel que se niegue a cumplir la orden y en Madrid se personan
representantes del Estado con documentos que muestran las propiedades
inmobiliarias y estráctos de cuentas corrientes de los trabajadores.
En caso de no producirse el relevo se expropian inmediatamente estas
propiedades, se embargan estas cuentas, se detiene al trabajador y se
le traslada a la cárcel.

- Ante esta situación y dado que definitivamente la "dictadura
democrática" se instaura sin tapujos y dada la indefensión mediática y
social que siente el colectivo, se decide optar por el mal menor sobre
todo para poner fin a la agonía que muchos usuarios de éste servicio
público están sufriendo y se ocupan las posiciones de trabajo.


PRIVILEGIOS DE LOS CONTROLADORES:

- Están de servicio las 24 horas del día los 365 dias del año.
- Tienen unas vacaciones que no se garantizan y no se les pagan.
- Si están de baja deben las horas que no trabajen.
- Se le deniegan permisos por enfermedad de familiar, hospitalización...etc
- Si un familiar muere en un día en que tu trabajas y asistes al
entierro, tienes que devolver el servicio.
- Si un día tiene fiebre y no acude al trabajo sin el parte de baja se
le sanciona con empleo y sueldo.
- Si tienes hijos no puedes pedir una reducción de jornada.
- Las condiciones operativas se rigen a discreción de unas personas
que desconocen lo más simple.
- Sus derechos sindicales no existen.
- Los servicios mínimos en caso de huelga están definidos en el 100%
- Sus derechos fundamentales son relativos tal y como manifiesta la
Audiencia Nacional.
- Se les puede modificar o alargar la jornada sin límite definido.
- No tienen garantizado un descanso semanal.
- Los pactos que firma con su empleador pueden ser violados por este
con total impunidad.
- Sus patrimonio, según los acontecimientos recientes, no están
garantizados. Su libertad tampoco.

Podría continuar con esta lista con muchos otros detalles pero creo
que es suficiente, dado que parece ser lo único que importa a la
sociedad, para formular la siguiente pregunta:

CUANTO SE PUEDE PEDIR AL MES POR ESTAS CONDICIONES??

Roberto

4 comentarios:

Alias dijo...

Pues resulta que otras cartas de controladores dicen cosas bastante diferentes a las por tí vertidas, denunciando con vergüenza la práctica común de las horas extra por pura codicia. Además, te pierdes en lamentarte por condiciones laborales que son comunes en muchos trabajos (eso sí, trabajos del mundo real). Y, por último, no dedicas ni un línea a comentar el pequeño detalle de que lo que hicísteis no se puede hacer. Ni desde el punto de vista legal, ni moral, ni ninguno. Demostrásteis un absoluto desprecio por la suerte de 300.000 personas, a las que dejásteis atrapadas en los aeropuertos. No quisísteis evaluar los dramas personales que con toda seguridad íbais a provocar (desde personas que no pudieron ir al entierro de su padre, hasta lo que uno quiera imaginarse entre 300.000 casos) porque, sencillamente, no os importa lo más mínimo. No os parásteis a pensar en el dinero que haríais perder a una infinidad de pequeños negocios, porque tampoco os importa. El colmo es que encima digas que finalmente volvíteis al trabajo para acabar con el caos creado. ¡Pero si el caos lo creásteis vosotros, e hizo falta decretar el estado de emergencia e ir a buscaros a vuestras casas con la policía para que volviéseis! Lo siento, pero esta carta no cuela; no infunde pena ni comprensión hacia el colectivo socialmente más insensible y egocéntrico, que trata a las vidas de los otros como mera moneda de cambio para mejorar sus horas de labor. Quien opina y obra así no está capacitado para este trabajo. Como no lo estaría un médico que dejase un herido en la mesa de operaciones porque le toca irse a casa. Todos los colectivos relacionados con los transportes públicos dirimen sus diferencias con la Administración mediante huelgas legales, con más o menos incidentes y muchas molestias para los de siempre, pero vosotros no habéis sido capaces, o bien habéis preferido mostrar vuestro poder con la sensibilidad de un elefante que pisa a una hormiga. Creo que ahora las hormigas se han unido y se están planteando comerse al elefante por los pies.

Sólo quien ama vuela dijo...

No me gusta hablar de lo que no sé. Y mucho menos si además no tengo tiempo de leer decretos-leyes, convenios, cartas y artículos para enterarme.

Desde mi punto de vista está mal, muy mal, abandonar, como se hizo, el puesto de trabajo en una protesta que afecta sobre todo a trabajadores (de vacaciones, pero trabajadores) y al único sector que mantiene mínimamente el tipo, siendo muy optimistas, en la crisis, que es el sector turístico.

Hay otras cosas que me parecen mal de parte de los controladores, pero como son de oídas y no están confirmadas no las digo.

Me parece mal, muy mal, querer reformar un convenio colectivo a base de decretos-leyes, es un abuso inadmisible por parte de la empresa que coincide con el estado.

Y es un síntoma de enorme debilidad decretar el estado de alarma como única solución para resolver la situación.

Estos son mis planteamientos, pero si no les gustan, tengo otros.

Zorba, el amigo de Osho dijo...

A Alias:
Yo no soy Roberto, pero estoy totalmente a favor de que Roberto se pueda expresar, porque, hasta la presente, lo únicos malos (eso sí, sin opción a explicarse, son los controladores).
Si tienes tantas cartas de controladores que dicen lo contrario,también me encantaría leerlas. Te invito a colgarlas en este post como comentarios.
En lo que a mí respecta, no estoy (aclaro)justificando la huelga (al menos, como se ha hecho) pero sí me gusta verter algunas opiniones que pudieran contrapesar la del "pensamiento único":
La ministra Salgado y Rubalcaba han reconocido que "sabían la que se iba a liar cuando promulgasen el decreto" (única forma de gobernar, por lo demás, a la que parece haberse acostumbrado el PSOE: a decretazo limpio). En tal caso, ¿no tienen nada de culpa lo del PSOE, que podían haber lanzado el decretazo después del puente? ¿No es sospechoso que provoquen este follón (que no lo provocan los controladores sino el decretazo gubernamental) justo le semana en que Prisa (no Vocento) publica los más bajos índices de popularidad de un gobierno en toda la historia de la democracia española? ¿No os resulta, cuando menos, chocante que los controladores sean malos, malísimos (ni siquiera tienen "un trabajo real", según dices)y el gbierno se vaya de rositas? ¿qué digo de rositas? Ha ganado credibilidad, al resolver la crisis que él mismo creó.
¿No os parece heavy que se declare el estado de alerta social y se les pase a depender del ejército? Eso sí que es ilegal e inmoral: hacer depender un organismo civil del Ejército: ahora, si protestan, es sedición, con pena de cárcel. Por favor, Alias, respóndeme: ¿te imaginas si quien les hubiera echado a los militares encima hubiese sido el PP? ¿Qué estaríamos diciendo ahora? ¿Es que con ZP y sus secuaces vale todo?
Dices que no hay un colectivo con menos credibilidad que el de los controladores aéreos? Perdona, pero ¿dónde te dejas al equipo de gobierno de Jose Luis Rguez Zapatero?

Zorba, el amigo de Osho dijo...

A Alias y Solo quien ama vuela:

Tengo que matizarme a mí mismo, lamentando mi error por desinformación.

De tanto leer y oír hablar de "la huelga" de controladores, yo créia que era una huelga (y que la ilegalidad consistía en no cumplir adecuadamente los servicios mínimos -o parte de ellos-). Me acabo de enterar de que no ha sido una huelga sino una "indisposición" casual del cien por cien de los controladores. Además, por lo visto, (si no vuelvo a estar mal informado) no es que les obliguen a trabajar más, sino que la discusión (parece ser, insisto) es acerca del concepto de "la horas" que han de trabajar: si ordinarias o extraordinarias.
Si es así, menos defensa aún tienen los controladores.
Con todo ello, apostillo:
-creo que deben explicarse y debemos escucharlos.
- el Gobierno no espera a lanzar el decretazo a después del puente, y lo hace pensando únicamente en él, y no en los 600.000 usuarios perjudicados (ZP también tiene su gran parte de culpa en la putada que se le ha hecho a la gente que no ha podido volar).
- Del Gobierno no me creo ya nada.
- No me gusta la militarización de la política: no se si rebela impotencia (como dico Solo quien ama vuela) o despotismo y totalitarismo. Ultimamente, el SOE me huele más a esto último.

Rebelion

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