13 de julio de 2009

Un buen acuerdo

Manuel Alcántara
Diario Sur

Los líderes de los ocho países más industrializados del mundo, conocidos como «los grandes de la Tierra», van a ocuparse de los alimentos terrestres y haciendo un esfuerzo acorde con su poderío van a destinar 14.400 millones de euros para luchar contra el hambre. Una lucha muy desigual, ya que hay mucho mayor número de hambrientos. Ese dinero, sin duda impresionante en su cuantía, estará destinado a África, que sigue llamándose así en los atlas, aunque en su mayor parte sea una escombrera, entre rinocerontes supervivientes y lanzas constantemente afiladas. Alguien acertó a resumir su expolio: «Cuando los blancos vinieron a África, teníamos la tierra y ellos tenían la Biblia. Nos enseñaron a rezar con los ojos cerrados y cuando los abrimos, los blancos tenían la tierra y nosotros la Biblia».

Ahora hay que ayudarles, pero cuidado con las obras de misericordia cuando se hacen en defensa propia. Estos subsidios a alta escala están hechos, como los pequeños, para que nadie venga a meternos la mano en el plato. A quienes no tienen nada hay que calmarlos prometiéndoles en discursos lo más elocuentes que sea posible que en el futuro van a tener algo. Por fortuna para los oradores hay mucha gente que todavía se lo cree.

En la localidad italiana de L'Aquila, donde por cierto está buscando casa Berlusconi, con la seguridad de encontrarla, se han reunido durante tres días los jefes de Estado y de Gobierno de 39 delegaciones de los cinco continentes. Todos están de acuerdo en que hay que luchar contra el hambre, que ya se sabe que es muy arriesgado combatir con alguien que la sufre. O repartimos un poco mejor o llegará un momento en el que los que no comen querrán formar parte de los que parten y reparten. Aunque se conformen con la peor parte.

No hay comentarios:

Rebelion

Web Analytics