6 de junio de 2008

Cuidado con la basura

Hoy la cosa va de ayuntamientos sevillanos.

Lipasam, la empresa municipal de limpieza pública del Ayuntamiento de Sevilla, ha incoado más de mil expedientes sancionadores contra ciudadanos a los que acusa de dejar la basura fuera de los contenedores.

La noticia en sí parece buena. Está bien saber que Lipasam cumple con celo su obligación de mantener limpias las calles de la ciudad. Lo malo está en el método empleado para deducir quién ha dejado una bolsa de basura fuera del contenedor.

Resulta que la empresa de limpieza se dedica a hurgar en las bolsas de basura encontradas en la calle en busca de documentos que identifiquen al presunto guarro. Mantienen que, una vez depositada en la calle, la bolsa de basura y los documentos que contenga no pueden ser considerados privados. Al parecer esta tesis está avalada por la propia Agencia de Protección de Datos.

La inseguridad jurídica de todo esto es evidente. Si a usted le cae mal su vecino, y vive en Sevilla, deje sistemáticamente fuera del contenedor una bolsa de basura con un papel en el que haya escrito el nombre y los dos apellidos de la víctima. En pocas semanas tendrá a su vecino enmarronado, y además por guarro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ayer publicaba El Correo el caso de un señora que ha sido sancionada, al dejar fuera la bolsa de basura, porque "habían cambiado el contenedor de calle". A mí me pasa exactamente lo mismo: que han quitado de mi calle los contenedores que había.
Aparte del método totalitario que usa Lipassam para obtener la información, me gustaría saber si el alcalde tiene que dar muchas vueltas, con la basura en la mano, para poderla echar al contenedor. No sé: algo me dice que debe tener un contenedor (mínimo) en la misma puerta de su casa.

Anónimo dijo...

¿Como soluciona Lipasam el problema del minusválido que por su incapacidad no puede acceder a la cuba para arrojar la basura y no tiene más remedio que dejarla en el suelo?
El día que se de la coincidencia, notificará una sanción de este tipo a un minusválido, saldrá en todos los periódicos, y el gerente de Lipasam tendrá que dejar su puesto por incompetente.

Rebelion

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