El primo de zumosol

Hace ya más de una década en que más de cien de los más prestigiosos científicos de todo el orbe escribían un informe alertando a las autoridades políticas acerca de la gravedad del problema ecológico a escala planetaria, y avisaban de sus futuras consecuencias en el ecosistema, esto es, en la casa de todos.

Deforestación de los fondos marinos, desertización progresiva, allanamiento paulatino de la selva amazónica, emisión de gases tóxicos (con sus fatales consecuencias en la capa de ozono), recalentamiento de la corteza terrestre (efecto invernadero) con el consiguiente riesgo de pérdidas de inumerables especies, deshielo de glaciares, subida del nivel del mar, contaminación sin límites que causa alteraciones capaces de provocar las mal llamadas "catástrofes naturales", etc, etc. Cuestiones como ésta originan el que, por ejemplo, en México D.F., cuando nace un bebé y respira, ya inhala, del medio, lo que equivaldría a una cajetilla de tabaco (sólo con nacer), etc, etc, etc.

Recientemente, Al Gore ha provocado la discusión con su documental sobre "el cambio climático" (sí, sí, ya sé que se ha dado cuenta tarde y que no hablaba de estas cosas cuando era vicepresidente USA pero, como dice un buen amigo mío, mientras unos, cuando abandonan sus cargos electos, se dedican a hacerse multimillonarios dando conferencias neoliberales por el mundo, él se enfrenta a las multinacionales, extendiendo el mensaje que las ONGs ecologistas llevan décadas proponiendo). En todo caso, no parece dudoso que, al menos, eso contribuye a incrementar la conciencia ecológica de la opinión pública.

Como todos sabemos, anteayer Mariano Rajoy dio una vuelta de tuerca a su capacidad de hacer el ridículo (y parecía que lo del vídeo de la bandera era ya insuperable), cuando afirmó, más o menos, que tampoco es para tanto, que "no es seguro eso del cambio climático, que es indemostrable, que ése no es el principal problema ahora mismo" - no sabemos si ése debe ser lo de la bandera en algunos ayuntamientos vascos, o la letra del himno nacional-. Todo ello para afirmar, a renglón seguido que, de todos modos, él no sabe mucho del tema pero sí su primo ("de Zumosol"), porque es catedrático de Física (!!!!!!), en una especialidad que no tiene nada que ver con lo que nos ocupa.

Teniendo en cuenta que multinacionales como Exxon están financiando "ad hoc" estudios que nieguen los hechos del cambio climático (obviamente, para poder seguir infectándonos a todos nuestro planeta); teniendo en cuenta que algunas compañías de telefonía móvil consiguieron (ni más ni menos) paralizar la investigación que la Comunidad Europea estaba realizando sobre los efectos cancarígenos de las radiaciones de las antenas de la telefonía móvil (ejerciendo del poderosísimo lobby que son); teniendo en cuenta que su amigo Aznar dirige la FAES, que promueve estudios ultraliberales que incitan al crecimiento económico, más allá de cualquier consecuencia ecológica, social o moral...

Teniendo en cuenta estas cosas, digo, la postura de Rajoy (del PP, por tanto, por extensión, puesto que todos le han dado la razón) ya sabemos dónde y con quiénes se alinea. Digo que le han dado la razón algunos políticos del PP, porque lo que son los científicos, se han llevado las manos a la cabeza al escucharle. Hasta el mismo Al Gore (nada sospechoso, por lo demás, de "rojuelo") se ha lamentado de ello. Y es que a esta gente (los "peperos" y sus amigos mediáticos, los "coperos"), cuando se trata de adelantar por la derecha, no hay quién les gane.

Aunque (humildemente), en realidad, yo tampoco sé muy bien qué hago hablando de estas cosas, de las que tampoco soy experto. Pero tengo un primo mecánico de coches, que sí que sabe mucho del humo de los tubos de escape. Y tengo otro primo que cría cochinos y sabe de campo. Les preguntaré a ellos.